En los últimos tiempos se ha consolidado la emisión de tasaciones de bienes inmuebles, como documento que fundamenta el recurso ante la administración, interpuesto por un ciudadano a la liquidación de algún impuesto, ya bien sea el de sucesiones, plusvalías o revisiones del impuesto de bienes inmuebles.

Estos impuestos tienen una liquidación basadas en ponencias de valores catastrales que entraron en vigor en muchos casos entre los años 2004-2007, momento en que el valor de los inmuebles estaban en lo más alto del ciclo econonómico. Con el descenso de los precios de estos bienes, resultan liquidaciones de impuestos que representan un considerable porcentaje sobre su valor actual, por lo que el ciudadano puede plantear recurir estas liquidaciones, quedando beneficiado al final del procedimiento por una liquidación acorde con el valor actual de estos bienes.